Nelson Garrido

Diablos de Turiamo

Sobre el proyecto
Christian Belpaire
Negro soy negro
República del Congo / Bélgica / Venezuela
Christian Belpaire

Negro soy negro

Sobre el proyecto

DIABLOS DE TURIAMO (CORPUS CHRISTI)
Nelson Garrido, Venezuela

Desde hace 35 años me he dedicado a la fotografía antropológica, y mi exploración se ha centrado en la cultura popular. En Diablos de Turiamo (Corpus Christi), lo popular es un gesto contemporáneo porque consigue actualizar códigos que se modifican en los aspectos formales, pero mantienen la esencia de su contenido tradicional. Podemos afirmar que lo popular es un diálogo entre la tradición y sus posibilidades, siempre diversas, para manifestarse.

Desde un inicio, esta perspectiva de trabajo ha influenciado la búsqueda de mi lenguaje personal, basado en puestas en escena y en ciertas formas de lo sagrado, lo impuro y lo contaminado. De este modo, la fotografía funciona como una caja de resonancia de la complejidad y diversidad cultural propia de la manifestación de lo popular, que se enriquece y transforma a través del tiempo. Lo popular emerge como resultado de la práctica colectiva de sujetos anónimos que renuevan la tradición y sus formas. Sin este diálogo sería imposible comprender lo complejo de lo contemporáneo. Lo popular es lo contemporáneo.

Nelson Garrido

NELSON GARRIDO
(1952) Caracas, Venezuela

A partir de la violencia, el erotismo y la cultura popular, Nelson Garrido ha desarrollado un lenguaje visual experimental y transgresor que valiéndose de puestas en escena, cuestiona las creencias y normas socialmente aceptadas. Obtuvo el Premio Nacional de Artes Plásticas 1991, convirtiéndose así en el primer fotógrafo venezolano en recibirlo. Ha sido seleccionado de la Trienal de Chile, la Bienal del Mercorsur y la Bienal de La Habana. Es autor del libro Nelson Garrido (La Cueva, 2017), y fundador de ONG (Organización Nelson Garrido), espacio cultural dedicado a la exhibición y enseñanza de la fotografía. En 2018 presentó la muestra retrospectiva La ONG Santiago + de lo profano a lo sagrado en Chile, en la que el artista reflexiona alrededor de la actual crisis política y social en Venezuela.

NEGRO SOY NEGRO
Christian Belpaire, República Del Congo - Bélgica

La historia de este libro comienza en el siglo XV, cuando Colón descubrió los territorios de Indias. Las guerras de conquista, el trabajo forzado y las enfermedades epidémicas importadas aniquilan rápidamente la mano de obra indígena. Entonces España decidió traer esclavos de África, los cuales después de largos viajes en primitivos veleros, eran almacenados en las islas del Caribe, desde donde se vendieron a todo el continente.

Reducidos a la condición de “bestias de producción”, fueron utilizados en las actividades mineras o en la naciente agricultura de la costa, como es el caso de Venezuela. Hace unos 150 años, antes de su liberación oficial, muchos escaparon y formaron pueblos cimarrones; otros se establecieron en las mismas haciendas donde trabajaban como esclavos o, más recientemente, emigraron hacia los centros urbanos en busca de mejor vida.

En su conjunto fundaron las actuales comunidades. Se estima que sólo el 10% de la población venezolana es de origen africano. Esta pequeña proporción, asociada a las mezclas raciales y a una estructura social de pigmentocracia (característica de la cultura hispánica), fue lo que debilitó las herencias africanas. Estos hechos, las incompletas investigaciones y las pobres recopilaciones visuales existentes, dificultaron la planificación del proyecto.

Dos años, 45,000 km recorridos y unas 10 mil fotografías tomadas fueron los catalizadores del trabajo sintetizado en este libro(1).

Fragmento del texto de Christian Belpaire publicado

en Negro soy negro (Biblioteca Nacional de Venezuela, 1984).

CHRISTIAN BELPAIRE
(República Democrática del Congo, 1949 – Nueva York, EE.UU., 2003)

Destacado fotógrafo de origen congolés, Christian Belpaire dedicó parte de su obra a la publicidad y al fotoperiodismo. Documentó como pocos la cultura yanomami, la región de los llanos y las comunidades afrodescendientes de Venezuela, en cuyas imágenes sobresale la cualidad bélica de la vestimenta de sus retratados. Del trabajo realizado en este país publicó los libros El llano (Editorial Arte Caracas, 1986), Dejaste atrás lo lejano (fundación Neumann, 1985) y Negro soy negro (Editorial Palladium, 1984). Después de estudiar foto en el taller de Jean-Pierre Sudre en 1970, sirvió como corresponsal gráfico en Sudámerica para la Agencia Camera Press. Su trabajo documental lo realizó también en Bélgica, Francia, Inglaterra y Chile. En septiembre de 2003 Belpaire terminó con su vida en la ciudad de Nueva York.

1. En relación con este texto, la antropóloga Sheila Walker hace las siguientes precisiones: la mano de obra indígena no fue aniquilada, si no más bien disminuida debido a las epidemias, las guerras de conquista y el trabajo forzado. Señala también que las islas del Caribe no fueron usadas como un lugar de depósito de los africanos esclavizados, sin embargo, islas como Curaçao se utilizaron como puntos de redistribución. Cabe mencionar que la gran mayoría de los africanos eran llevados directamente al continente americano, no hacían ningún tipo de escala en el Caribe. Asimismo Walker considera el término “bestias de producción” en desuso, pues muchos africanos tenían conocimientos en la tecnología de la época, particularmente en la extracción del oro. Por último, la antropóloga apunta que existen estadísticas donde se demuestra que la población afrovenezolana en ese entonces era superior al 10%.